jueves, 30 de julio de 2015

El Lobo Estepario (Sólo para locos)

(1927) Hermann Hesse 

Por Patricia Munguía

Esta novela explora el sentimiento de otredad con el que muchos nos hemos identificado en algún punto de nuestra existencia y que surge en la introspección de nuestro ser, en la búsqueda de lo que llamamos el sentido de la vida.

El Lobo Estepario es la conmovedora y a la vez tortuosa voz interior de Harry Haller, quien nos narra y describe la dualidad de su esencia como hombre lobo, cuya transformación no se da a la luz de la luna sino a través de todas las emociones que como ser humano es capaz de experimentar y que sin embargo, en ocasiones, desdeña por creerlas contradictorias o viles. Se trata de una personalidad torturada por la culpa que le causa el deseo de pertenecer a las convenciones sociales pero que al mismo tiempo desprecia por su banalidad e hipocresía. Por ello, todos los sentimientos nobles, bondadosos e inspirados en la justicia los atribuye al animal, y aquellos relacionados al odio, la inmundicia, la deshonestidad y la codicia los imputa al ser humano.

Hesse logra plasmar el estado más puro de la juventud, aquel breve instante en el que el ser humano define sus ideales y convicciones, pronunciamientos vastos en honestidad que lo empujan a cuestionarse si realmente quiere pertenecer a un universo en el que no hay cabida para la ingenuidad; infortunadamente, al paso de los años, algunas personas pierden el entusiasmo, el interés y la fe por estos asuntos. Esta historia nos habla de aquellos que logran conservar su espíritu intacto, y cuando por alguna razón son atraídos y aceptados al interior de la gran maquinaria de la vida y se encuentran rodeados de individuos que se desenvuelven con tanto agrado y facilidad dentro de ésta, el lobo estepario se burla y siente asco por esta gente, pero aún más por el hombre con quien cohabita en las profundidades de su mente, quien también, aunque no sin pesar, disfruta formar parte de esta sociedad. Así, nuestro protagonista, atribulado por esta contrariedad, recorre el mundo, y en el camino conoce a Armanda, una joven que, a diferencia de Harry, es capaz de disfrutar la vida y encontrar plenitud en esa cualidad de lobo estepario.



miércoles, 29 de julio de 2015

Vida y Época de Michael K (1983)


Por Karina López Correa

Es una novela que señala de manera transparente la separación que ha hecho el hombre entre la naturaleza y la cultura, describe lo mucho que se ha alejado el hombre de su animalidad para dar paso a la cultura, quien es la encargada de delimitar los rasgos de lo animal para diferenciarlos de las características humanas. A partir de esta delimitación se construye el concepto de naturaleza humana.

La cultura es, entonces, quien eleva a la humanidad por encima de la animalidad y despoja al hombre de sus características primitivas, para que pueda desarrollarse dentro de un nivel racional que excluye cualquier atributo salvaje. Michael K no está dentro de los parámetros que la cultura ha instaurado para definir la naturaleza humana, por ello jamás logra funcionar dentro de la civilización y la época en las que nació.

Coetzee construye un personaje que cuestiona si ha sido acertado separar al hombre de la naturaleza, cuando son inseparables, pues permanecen unidos en el cuerpo. Cuestiona también qué tan benéfica es la cultura y la civilización para el hombre, qué bondades trae la historia, la guerra, la medición del tiempo y otros constructos sociales, o para quién las trae. Le da existencia a un ser que sólo cabe en la literatura, porque en el mundo y su cultura no hay espacio para alguien como Michael K.

Sin ser tendenciosa, y sin la pretensión de llegar a una resolución final, esta novela hace que el lector reflexione sobre el distanciamiento que existe, y cada vez aumenta más, entre el hombre y sus necesidades y en qué medida estas necesidades son producto de la cultura y no de su naturaleza.

martes, 28 de julio de 2015

Editorial - Vorágine [Narrativa] No. 3


¿A quién no le ha cosquilleado el deseo de conocer a alguno de sus personajes favoritos de la literatura o visitar los increíbles mundos que habitan? A lo largo de nuestra existencia hemos asistido a diversos encuentros con seres imaginarios rebosantes de vida, ingenio y emociones que a cada vuelta de página nos convidan a enamorarnos, envalentonarnos, sufrir, reír, soñar, crear, pensar, discutir o mejor aún, a vivir tan intensamente como sólo ellos son capaces; y aunque el autor es la mente maquinadora de todos estos posibles mundos y múltiples personalidades, cada uno de ellos logra tener vida propia y seducirnos permitiéndonos acompañarlos en su travesía a través de la lectura. El universo de la literatura abarca infinitas realidades a las que podemos escapar tantas veces como queramos, por ello, en esta tercera edición deseamos homenajear a los creadores y a los protagonistas de nuestras historias preferidas, aquellas novelas inolvidables que dejaron una semillita creciendo dentro de nosotros.

viernes, 10 de julio de 2015

Primer Amanecer


Esperando el anochecer 
y salir a saciar mi sed 
acecho a mi presa 
antes de que amanezca. 

Sólo quiero seguir aquí 
unos cuantos siglos más 
y saciar mi sed de amar 
espero que sea hoy. 

CORO 

Luces en mi interior 
llamas en mi corazón 
el amanecer llegó. 

Después de tantas noches mirando 
he decidido estar a tu lado 
serás presa de mi corazón. 

He podido encontrar el amor 
aunque sé que el final llegó 
te recordaré...
con mi alma quemándose. 

CORO...

https://www.youtube.com/watch?v=ZfMPMbLhGAI

miércoles, 8 de julio de 2015

Partir


Otro día más sin verte, sin saber de ti, pero con la certeza de que nuestra separación irradia tu felicidad y esa verdad hiere, destroza. 

Duele saber que estás riendo sin mi; duele imaginarte en brazos de aquella a quien obsequiaste una rosa; duele saberte dichoso y pleno a causa de mi ausencia; duele este insidioso recuerdo tuyo; duelen todos estos pensamientos que te contienen y con necedad te retienen como a un veneno ponzoñoso; duele tanto que no me quieras y me duele tanto aún quererte. 

Era inevitable; tú tienes el alma podrida y yo me he intoxicado con ella letal e irremediablemente. Succionaste mi alma y ahora la desechas, dejándome vacía y sola. Inútil y cruel proceder, pienso yo. 

¿Por qué?, ¿para qué?, te he preguntado. 

Exhalas silencio y ese frío aliento recorre mi piel, antes suave y cálida, penetra tan profundamente que ya siempre será parte de mi; cuando en tu mirada busco una respuesta observo un gran abismo en el que alberga la nada. 

Tú ya te has ido.


lunes, 6 de julio de 2015

La Relevancia del Muerto

Por Disraeli Correa

-Nadie vio lo que pasó y vaya usté a saber desde a qué horas pasó, pa'mi que cuando el chamaco lo encontró ya llevaba rato torciendo la pata- afirmó Martina muy serena.
-¿Y qué dijo el niño?- preguntó susurrando su cuñada.
-¿Pus qué va a decir tú? nada si del susto apenas hilvanó palabra donde hallar el cuerpo- respondió también susurrando.
-Pobre flaquito, a su edad y ya con esas visiones en la cabeza, seguro no duerme esta noche- comentó la cuñada acongojada mientras trataba de imaginar lo que ella sentiría de haberse encontrado la tétrica escena.
-¡Seguro no duerme en toda la semana!- repuso Martina sin poder ocultar su sorna.
-¿Tanto así?, ¿pus cómo quedó Don Sabás?- preguntó la cuñada de Martina olvidándose ya de susurrar para no interrumpir a los presentes, quienes se dedicaban a rezar, a llorar o a permanecer de pie y muy serios pensando en cualquier cosa.
-Horrible, chueco y abierto por todas partes, ¡venga vamos a verlo!- exclamó Martina al momento que jalaba a su cuñada por el rebozo.
Varias miradas de desaprobación se posaron en ellas aunque no faltó quien por allí esbozara una pequeña sonrisa.
-¡Al establo deberían irse, par de vacas desvergonzadas!- les imprecó una anciana que se encontraba rezando junto al féretro como para que no se le escapara el difunto.
-¡Váyanse ya!- gritaba la anciana mientras agitaba su rosario como si fuese un látigo.
-Oh ya cállense las tres- se escuchó en el fondo.
____________

El caballo no se detiene, ¿hasta dónde me llevara?, ya casi no siento las piedras ¿será eso bueno o malo?, ¿por qué será que las nubes toman tantas formas? Jamás te entendí -sonrió- ¿Qué más da lo que no entiendo o el porqué de las nubes y sus formas?, como sea son hermosas, se rasgan como el algodón de azúcar. Me ha arrastrado por mucho tiempo, y en esas cavilaciones nubosas andaba cuando un escalofrío le recorrió el cuerpo, esa peculiar sensación de saberse observado. Inquieto, Don Sabás giró la mirada y mayor sería su sobresalto al aferrarse de su asiento y ver a quien lo observaba desde el otro extremo de la barca (popa, para los entendidos), se estremeció tanto que de pronto dejó de moverse y en vano quiso gritar pues había perdido la capacidad, capacidad que recuperó sólo para escupir algunas dudas.
-¿Cuándo llegué a este barco?, ¿de dónde salió este río?, ¿quiénes son ustedes? ¿Por qué no contestan?, ¿a dónde me llevan?, ¿y mi caballo?-
Nadie pareció escucharlo, la persona que remaba volteó pero su mirada no iba dirigida a él pues como mesmerizada miraba hacia otra parte, quizá buscando la respuesta en algún otro sitio. Nadie contestó.
Sabás, que nunca había ido a la escuela, poco sabía acerca del ser y estar, pero sabía que no era y sabía que no estaba, sobre quién sabe qué barca en quién sabe qué río a quién sabe qué hora y con quién sabe qué destino. Entonces observó y sus ojos comenzaron a cerrarse.
____________

Entre azul y medianoche, ya se encontraban varias personas reunidas en casa y a causa de Don Sabás, de las cuales más de la mitad estaba en cualquier lugar menos en el lugar en el que estaba. El aroma del café con canela invadía la atención de todos, cuando Mercedes, que venía entrando, se encontró con dos jóvenes algo ebrias que iban saliendo, dijo:
-No se marchen todavía -dijo la viuda- vengan por un café que ya traigo los bolillitos-
-¿Y quién pidió pan doña Meche?, a ver si pone un poco de música y saca mejor el piquete pal café, nomás pa'animar la cotorra- Mercedes se limita a sonreír mientras aquellas carcajean.
-¡Ah! y a la salud de don Sabás- enfatiza Martina- que así él lo hubiera querido-
-Sí ¿ verdad?- pensó la viuda pero no pronuncio palabra alguna, se metió a su casa y en silencio ofreció café con pan.
-Adiós viejo terco, ¡salud por Don Sabás!-.


viernes, 3 de julio de 2015

La Dictadura del Tiempo



Es curioso cómo funcionan los viajes en el tiempo, sin darte cuenta una vez que empiezas a viajar y a modificar los sucesos y las líneas temporales, pierdes el sentido de tu propia existencia, todo empieza con un deseo muy simple: mejorar el pasado y ¿por qué no? ¿por qué no cambiar sucesos que todos sabemos que de haber sido diferentes no solo mi propia vida sino la de los demás sería mejor, claro no algo como matar a Emil Novikov, que sabría yo de cómo llegar hasta él, te aseguro que moriría antes de siquiera pisar la Rusia Progresista pero hay otras formas ¿me entiendes? matar a su madre antes de que él pudiera nacer o mejor aún a su abuelo un pobre granjero Danés que nadie extrañaría, no es un deseo egoísta, siempre mi intención fue para bien, pero con cada cambio de alguna forma algo peor sucedía, un nuevo dictador emergía y era más cruel que el anterior, después de esto un tal Hitler apareció en Alemania y desató la peor de las guerras, o si detenía al Dr. Collingwood de crear el virus Norwalk un tal Oppenheimer inventaba una bomba capaz de destruir una ciudad entera, o si impedía que el emperador romano Appius subiera al trono de alguna forma este cambio retrasaba el progreso de la humanidad un milenio, creando algo llamado edad media y así todo seguía, un genocidio más cruel del que yo pude haber evitado, tiranías, guerras, créeme yo quería un mundo mejor pero en cada regreso cometí un error diferente o no alcancé a vislumbrar las repercusiones de cada uno de los cambios que lograba en mis viajes, haciéndome imposible volver a mi tiempo, hasta poder enmendar la propia existencia.

Y aquí estamos, esperando que des la orden para mi ejecución, pero acaso no tienes un poco de curiosidad por saber todo lo que he vivido? Los lugares y los momentos en qué he estado? ¿lo que el futuro te depara? A veces el destino es cruel, todo el tiempo a mi alcance y aún así qué no hubiera dado por saber de antemano que ustedes me iban a capturar y a ejecutar, ustedes que ante mis ojos no son más que cavernícolas, pobres diablos que van por el mundo a tientas sin saber lo que el futuro les depara.

Por favor, por favor, no me mates, no des la orden, yo puedo enseñarte el secreto del viaje en el tiempo, podrías hacer lo que tu quisieras, antes de que me atraparas estaba a punto de lograr el cambio más grande en la historia del hombre, todo el conocimiento que tenía acumulado, este preciso momento lo iba a cambiar todo y parece que el universo se defiende así mismo, como si fuera un organismo vivo que reaccionara ante un ataque que pusiera en riesgo su existencia, por favor déjame continuar con mi misión, déjame terminar lo que vine a hacer, no me crucifiques, he preparado a 12 hombres para que continúen con mis enseñanzas, pero no les he dicho todo, los he preparado de la única forma que ellos entenderían, con parábolas y cuentos de una vida más allá de la propia vida, ellos harán todo lo que les dije pero me necesitan, por favor Poncio no lo hagas.


jueves, 2 de julio de 2015

Vacío


Después de vagar por las calles húmedas de la ciudad, con sus ropas húmedas, cabellos húmedos, con sus pensamientos aún mojados, Carlo y Ana se tomaban el tiempo de caminar lento hacia el centro del lugar; él, sólo pensaba con redundancia en cómo había empezado todo lo suyo, a lo que le dijo:

—Ana, mujer, ¿qué crees que sería de mí en estos tiempos si no te hubieses fijado en mí aquella tarde de Abril?

—Hombre, pues qué querías que pasara, no lo sé, ni mínima idea tengo pero seguramente andarías vagando por tu cabeza, seguirías siendo el hombre frío, reservado y alto pero más viejo que cuando te conocí.

—No estás respondiéndome nada.

— ¿Lo ves?, también seguirías siendo un tipo de lo más necio, de lo más inconforme…

— ¿Eso crees de mí, eso te parezco?, ¿sólo un cuerpo inconforme, necio, viejo y húmedo?

—….Eso somos… -dijo Ana y le golpeó el hombro izquierdo.

Decidieron seguir caminando y esperar el bus, el cual los dejaba a unos cuantos minutos de su casa.

Más tarde, de noche, Carlo seguía con la misma pregunta, y ya que Ana no había podido contestarle, él solo creaba posibles respuestas.

— ¿Será que soy un frío, necio e inconforme cuerpo?, meramente no me cabe duda, lo soy, pero es que simplemente no me es posible cambiar; sí, lo sé, el cambio existe, pero igual uno no lo logra siempre, a mis cuarenta y cuatro años sigo sin encontrar algo que verdaderamente sacie mi inconformidad, todo lo que tengo, tuve y sé que tendré no basta, nada es bastante, lo bastante no está en mí. No soy bastante.

Después de divagar, Carlo salió, como ya de muchísima costumbre, a caminar a la arboleda de la avenida en compañía de Franz, su antiguo pastor inglés. Cada paso dado cuestionando su vida desde que ha tenido uso de razón (eso es lo mejor que uno puede hacer desde que éste haya remplazado al paradigma religioso); caminó, miró a Franz y de igual manera cuestionó la existencia de él — ¿qué estarás pensando tú de mí, Franz?, también te parezco alguien muy inconforme con todo lo mío?—

Dando ya casi las nueve de la noche regresó a casa junto con el animal, abrió la puerta, saludó a su mujer y fue directo a su escritorio a preparar la columna para el día siguiente. Carlo era un antiguo miembro de una revista independiente, esta no seguía ninguna corriente, era muy libre.

El hombre estaba tan aturdido por no poder seguirle el hilo a cada cosa que escribía; anotaba, continuaba y borraba, luego tiraba…terminó optando por reciclar ideas, no es tan buena opción pero siempre salva al creativo de cualquier apuro. Luego, frustrado, caminó hasta el lado izquierdo de su cama y se tiró con la vista hacia el techo, hacia afuera, cansado estaba de mirarse hacia adentro, no le gustaba ver qué ni quién era, ¿por qué nos asustará tanto el tener encuentros con nosotros mismos?, Carlo se evadió una vez más y no se vio a sí mismo en mucho tiempo; ya no quiere saber nada más de él.

Ya no quiere ser él.

miércoles, 1 de julio de 2015

Silent Hill







Team Silent (1999)

Por Javier Leyva

El videojuego de PSOne "Silent Hill" llegó en 1999 para convertirse en el mejor survival horror de todos los tiempos, aún vigente a pesar de la superior tecnología con que cuentan las consolas y juegos de nueva generación. Fue la respuesta de Konami al exitoso "Resident Evil" de Capcom, que por entonces ya había establecido al survival horror como un género nuevo y atractivo para los gamers de todo el mundo; varias otras desarrolladoras voltearon la mirada a este terreno fértil para comenzar a explotarlo, pero la mayoría de las veces con simples y descaradas copias de la joya de Capcom, que solo terminaban por darle mal nombre al género; sin embargo, uno de los pocos que logró sobresalir fue "Silent Hill", estableciendo lo que sería el juego de horror por antonomasia.

Fue creado por la desarrolladora japonesa Silent Team, que trabajó exclusivamente en esta serie hasta la cuarta entrega, tras la cual decidió separarse de Konami; por su parte, esta cedió la responsabilidad de la saga a equipos norteamericanos, para decepción de millones de fanáticos que no aceptaron de buena gana el cambio, rechazando los nuevos juegos aun antes de ser lanzados. Y es que Silent Team creó un estilo tan único en la industria que resulta simplemente irrepetible y su primer título es de una manufactura tan perfecta que aun para ellos mismos se volvió insuperable.

La historia del juego comienza cuando nuestro protagonista Harry Mason y su hija de siete años, Cheryl, salen en un viaje vacacional y en el camino se cruzan con la fantasmagórica imagen de una chica que les hace perder el control de su camioneta y volcarse montaña abajo; al despertar, Harry se da cuenta de que su hija no está y decide salir de inmediato en su búsqueda, a través de las desiertas calles y oscuros edificios que componen el mítico pueblo de Silent Hill. En la travesía se enfrentará a sus peores pesadillas en un mundo lleno de inconcebibles criaturas que tratarán de acabar con él, pero por suerte cuenta con la ayuda de la oficial de policía Cibyl Bennett, que también ha quedado atrapada en el pueblo. Además de esta, conocerá a otras personas, como el Dr. Kaufmann, la enfermera Lisa, y la misteriosa Dahlia Gillespie, quienes los guiarán en un camino que, además de llevarlo a su hija, revelará el secreto de Silent Hill y el legado de satanismo que oculta.


La trama es desarrollada por medio de diálogos cortos y pistas crípticas que a menudo sólo sirven para confundir más la situación; sin embargo, es la forma más acertada de hacerlo pues el juego mantiene un ambiente general de surrealismo tal, que da la impresión de estar experimentando una vívida pesadilla. Este sentimiento onírico es una de las particularidades de la saga, pues Silent Hill se manifiesta de acuerdo a la persona que se encuentre en éste, como un espejo del espacio interior que se proyecta en una ciudad donde los demonios propios serán quienes le atormenten.

La verdadera estrella del juego es el impresionante ambiente del pueblo, lleno de niebla y oscuridad; los programadores buscaron limitar el enfoque a la acción en favor de un terror psicológico derivado de la tensión y la soledad que provoca. Para recorrerlo se necesita de una linterna, por lo que la visión es limitada a unos cuantos metros que abarca el espectro de luz (a pesar de ser consecuencia de sus limitaciones gráficas, resultó ser toda una genialidad). Es esencial consultar los mapas todo el tiempo, en ellos Harry marcará datos de interés para no perderse en los laberinticos edificios y resolver puzles realmente difíciles. También cuenta con una radio que emite sonidos parecidos al famoso white noise cuando un enemigo está acercándose, lo que crea una gran tensión pues no se le puede ver hasta que está muy cerca. Todos estos aspectos, combinados con la inigualable banda sonora creada por Akira Yamaoka, dieron por resultado uno de los juegos más aterradores de la historia, por lo que jugarlo solo y de noche realmente es una hazaña de valor.

Aun con todo lo bueno que es, el juego tiene carencias muy notables, como el apartado gráfico que muestra escenarios con poco detalle y texturas acartonadas en los personajes. Además, el gameplay no es muy entretenido o retador, pues el uso de armas es inexacto y el movimiento del protagonista muy limitado, quizás porque se trató de mostrar que Harry es sólo una persona común y no un súper hombre de acción como los que aparecen en otros juegos.

Para todos los amantes del terror psicológico en su estado más puro, "Silent Hill" es un juego imprescindible. Las constantes referencias a obras clásicas y autores que contiene (Alfred Hitchcock, Richard Matheson, "The Shining", etc.) dejan ver que fue hecho por verdaderos conocedores del género, quienes no sólo quisieron rendir honor a éstos, sino crear un objeto de culto equiparable en grandeza y reconocimiento; y sin duda alguna lo lograron.